En las últimas semanas de la mayoría de los embarazos, su bebé estará con la cabeza hacia abajo en su útero. Un pequeño porcentaje de bebés adoptan posiciones diferentes, algunas de las cuales hacen arriesgado el parto vaginal y requieren intervención médica. A continuación, detallamos algunas posiciones anormales de parto sobre las cuales usted debe tener conocimiento:
Las posiciones de parto anormales y raras abarcan la presentación de cara, presentación de frente (o frontal) y la presentación compuesta, en la cual una mano o pie emerge de la vía del parto con la cabeza o las nalgas.
Por lo regular, su médico evaluará la posición del bebé antes de que usted entre en el período de dilatación con sólo palpar su útero. Una posición anormal sospechosa se puede confirmar a través de una ecografía y usted y su médico pueden analizar las opciones más seguras para su parto.
Algunas posiciones anormales tienen mayor probabilidad de presentarse bajo circunstancias específicas:
Con todas las posiciones anormales, hay un riesgo adicional para la madre y el feto. Un cordón dañado u obstruido puede poner en peligro el suministro de oxígeno del bebé. Si el bebé permanece sin oxígeno por mucho tiempo, puede sufrir daños cerebrales e incluso morir. También, con las posiciones anormales, hay un mayor riesgo de sufrir desgarres cervicales o vaginales.
P: Si tuve un embarazo con posición anormal, ¿cuáles son las posibilidades de que suceda nuevamente?
R: Si el bebé estaba en posición anormal debido a la forma de la pelvis o su útero, las probabilidades de una posición anormal en su próximo embarazo aumentan. En otros casos, la posición puede haber estar asociada con una afección como trabajo de parto prematuro o placenta previa y no sucedería en otro embarazo, a menos que la afección ocurra de nuevo.