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Enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19)

Coronavirus - 2019; Coronavirus - nuevo 2019; 2019 Nuevo coronavirus; SARS-CoV-2

La enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19) es una enfermedad respiratoria que causa fiebre, tos y dificultad respiratoria, pero se pueden presentar muchos otros síntomas. La COVID-19 es provocada por un virus altamente infeccioso. La mayoría de las personas padece una enfermedad de leve a moderada. Los adultos mayores y las personas con ciertas afecciones de salud tienen un alto riesgo de enfermedad grave y muerte. Más de un millón de personas en Estados Unidos han muerto a causa de COVID-19.

Causas

La COVID-19 es causada por el virus SARS-CoV-2 (síndrome respiratorio agudo grave coronavirus 2). Los coronavirus son una familia de virus que pueden afectar a personas y animales. Pueden causar enfermedades respiratorias de leves a moderadas, tales como el resfriado común. Algunos coronavirus pueden ocasionar enfermedades graves que pueden llevar a neumonía e incluso la muerte.

La COVID-19 se propaga más fácilmente a personas con contacto cercano (aproximadamente 6 pies o 2 metros). Cuando alguien con la enfermedad tose, estornuda, canta, habla o respira, las gotitas y partículas muy pequeñas se rocían en el aire. Usted puede contraer la enfermedad si inhala estas gotitas o partículas o estas llegan a sus ojos, nariz o boca.

En algunos casos, la COVID-19 se puede propagar por medio del aire e infectar a las personas que están a más de 6 pies de distancia. Las pequeñas gotitas y las partículas pueden permanecer en el aire por minutos a horas. Esto se denomina transmisión aérea (o en aerosol), y ocurre especialmente en espacios cerrados con poca ventilación. Sin embargo, es mucho más común que la COVID-19 se propague a través del contacto cercano.

Con menos frecuencia, la enfermedad se puede propagar si usted toca una superficie que tenga el virus y luego se toca los ojos, la nariz, la boca o la cara. Pero esta es una manera mucho menos común en la que el virus se propaga.

La COVID-19 se puede propagar rápidamente de persona a persona. A medida que el virus se propaga, puede cambiar, y se presentarán variantes nuevas del virus. Las diferentes variantes pueden propagarse más rápidamente o ser más resistentes al tratamiento o las vacunas. Tomar medidas para frenar la propagación del virus, como vacunarse contra la COVID-19, puede ayudar a retrasar el desarrollo de nuevas variantes.

Si bien la emergencia de salud pública federal por la COVID-19 en los Estados Unidos ha terminado, la COVID-19 sigue siendo un problema de salud, en particular para las personas con alto riesgo de enfermarse gravemente.

Síntomas

Los síntomas de la COVID-19 oscilan de leves a graves. Las personas mayores y las personas con ciertas afecciones de salud existentes tienen un riesgo mayor de desarrollar enfermedad grave y morir. Las afecciones de salud que aumentan este riesgo incluyen:

Los síntomas de la COVID-19 pueden incluir:

Esta no es una lista completa de los posibles síntomas. Los síntomas pueden cambiar con las nuevas variantes del virus.

Es posible que algunas personas no presenten síntomas. Muchas personas presentan algunos, pero no todos estos síntomas. Los síntomas también pueden variar, dependiendo de si usted está vacunado contra la COVID-19.

Los síntomas pueden aparecer dentro de 2 a 14 días después de estar expuesto. Con mucha frecuencia, los síntomas aparecen alrededor de 5 días después de la exposición. Sin embargo, usted puede propagar el virus incluso cuando no tenga síntomas.

Los síntomas más graves que requieren buscar atención médica de inmediato incluyen:

Pruebas y exámenes

Si tiene síntomas de COVID-19, puede hacerse un autoexamen. Su proveedor de atención médica también puede decidir hacerle un examen para detectar la enfermedad. 

Si le hacen el examen para COVID-19, se recolectarán hisopados de la parte posterior de la nariz, de la parte delantera de la nariz o la garganta para realizar la prueba para SARS-CoV-2.

Tratamiento

Si se está recuperando en casa, el tratamiento complementario se proporciona para ayudar a aliviar los síntomas. Las personas con enfermedad grave serán tratadas en el hospital. 

Los tipos de medicamentos administrados pueden variar según qué tan enfermo esté, sus factores de riesgo de enfermedad grave a causa de la enfermedad, su edad y posiblemente qué variante del virus está causando la infección.

Si su prueba de COVID-19 dio positivo, su proveedor puede recomendarle medicamentos antivirales.

Si se administran poco después de infectarse (5 a 7 días, dependiendo del medicamento), estos medicamentos le ayudan a su sistema inmune a combatir el virus. Se les pueden administrar a adultos y niños que no están hospitalizados. Estos medicamentos incluyen: 

  • Nirmatrelvir con ritonavir (Paxlovid), un medicamento antiviral, para ayudar a frenar el virus. Es una pastilla que usted toma en casa.
  • Remdesivir (Veklury), un medicamento antiviral, para ayudar a frenar el virus. Este medicamento se administra a través de una vena (IV). Usted deberá ir a un centro de atención médica por 3 días seguidos para recibir este medicamento.
  • Molnupiravir (Lagevrio), un medicamento antiviral usado únicamente para adultos. Es una pastilla que usted toma en casa. 

Si lo están cuidando en el hospital y está recibiendo oxigenoterapia, el tratamiento para COVID-19 puede incluir los siguientes medicamentos: 

  • Remdesivir, un medicamento antiviral, para ayudar a frenar el virus. 
  • Dexametasona, un medicamento esteroide, para ayudar a disminuir una respuesta inmune hiperactiva en el cuerpo. Si la dexametasona no está disponible, le pueden administrar otro corticosteroide como prednisona, metilprednisolona, o hidrocortisona.
  • Le pueden dar uno u otro medicamento o ambos juntos.
  • El baricitinib o el tocilizumab para ayudar a disminuir la actividad del sistema inmune, dependiendo de su condición.
  • Medicamentos por cualquier complicación derivada de la enfermedad. Por ejemplo, le pueden dar anticoagulantes para ayudar a disminuir la probabilidad de coágulos de sangre, o le pueden hacer diálisis si sus riñones no están funcionando adecuadamente.

Basado en la evidencia disponible, las directrices de tratamiento actuales de los Institutos Nacionales de Salud no recomiendan usar algunos fármacos para COVID-19, incluyendo cloroquina, hidroxicloroquina, e ivermectina. No tome ningún fármaco para tratar la COVID-19, excepto aquellos que haya recetado su proveedor. Consulte con su proveedor antes de tratarse usted mismo o a un ser querido con vitaminas, nutrientes o algún medicamento recetado en el pasado para otros problemas de salud. Debido a que algunos medicamentos para COVID-19 tienen interacciones con otros medicamentos o suplementos que usted pueda estar tomando, siempre verifique con su proveedor antes de empezar a tomarlos.

Posibles complicaciones

Las complicaciones pueden incluir:

  • COVID prolongado, que se define por presentar síntomas duraderos de COVID-19 que continúan por 4 semanas o más después de la infección con el virus (secuelas posagudas por infección con SARS CoV-2 [PASC, por sus siglas en inglés])
  • Daño al corazón y vasos sanguíneos, riñones, cerebro, piel, ojos y órganos gastrointestinales
  • Insuficiencia respiratoria
  • Muerte

Cuándo contactar a un profesional médico

Debe consultar con su proveedor:

  • Si tiene síntomas y piensa que puede tener COVID-19
  • Si tiene COVID-19 y está en un grupo al que se le puede suministrar medicamento antiviral
  • Si tiene COVID-19 y sus síntomas están empeorando

Llame al 911 o al número local de emergencias si tiene:

  • Dificultad respiratoria
  • Dolor o presión en el pecho
  • Confusión o incapacidad para despertarse
  • Labios o cara azulados
  • Cualquier otro síntoma que sea grave o le preocupe

Prevención

Usted puede tomar medidas para protegerse y proteger a otros de la COVID-19:

Referencias

Centers for Disease Control and Prevention website. COVID-19: COVID-19 treatments and medications. www.cdc.gov/coronavirus/2019-ncov/your-health/treatments-for-severe-illness.html. Updated January 18, 2024. March 13, 2024.

Centers for Disease Control and Prevention website. COVID-19: Frequently asked questions about COVID-19 vaccination. www.cdc.gov/coronavirus/2019-ncov/vaccines/faq.html. Updated October 4, 2023. Accessed March 13, 2024.

Centers for Disease Control and Prevention website. Long COVID or post-COVID conditions. www.cdc.gov/coronavirus/2019-ncov/long-term-effects/index.html. Updated July 20, 2023. Accessed September 19, 2023.

Centers for Disease Control and Prevention website. Respiratory virus guidance. www.cdc.gov/respiratory-viruses/guidance/respiratory-virus-guidance.html. Updated March 1, 2024. Accessed March 5, 2024.

Centers for Disease Control and Prevention website. Stay up to date with COVID-19 vaccines. www.cdc.gov/coronavirus/2019-ncov/vaccines/stay-up-to-date.html#children. Updated March 7, 2024. Accessed March 13, 2024.

Centers for Disease Control and Prevention website. Variants. www.cdc.gov/coronavirus/2019-ncov/variants/index.html. Updated February 6, 2023. Accessed March 13, 2024.

National Institutes of Health. COVID-19 treatment guidelines. Clinical management of adults summary. www.covid19treatmentguidelines.nih.gov/management/clinical-management-of-adults/clinical-management-of-adults-summary/. Updated February 29, 2024. Accessed March 13, 2024.

  • COVID-19 - ilustración

    Infección con coronavirus 2 del síndrome respiratorio agudo grave (SARS-CoV-2, por sus siglas en inglés) causa COVID-19, una enfermedad respiratoria que varía desde síntomas leves hasta neumonía e incluso la muerte. Los síntomas ocurren dentro de los 2 a 14 días posteriores a la exposición al virus y pueden incluir fiebre, tos, falta de aliento, escalofríos, dolor muscular, dolor de cabeza, dolor de garganta y pérdida del sentido del gusto o del olfato. COVID-19 puede ser más grave en personas mayores o personas con afecciones crónicas como enfermedades cardíacas o diabetes.

    COVID-19

    ilustración

  • Coronavirus - ilustración

    Los coronavirus son una familia de virus. Las infecciones por coronavirus pueden causar enfermedades respiratorias, tales como el resfriado común. Algunos coronavirus pueden ocasionar enfermedad grave que puede llevar a neumonía e incluso la muerte.

    Coronavirus

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  • Sistema respiratorio - ilustración

    El aire se inhala a través de los conductos nasales y viaja a través de la tráquea y los bronquios hasta los pulmones.

    Sistema respiratorio

    ilustración

  • Tracto respiratorio superior - ilustración

    Los principales conductos y estructuras del tracto respiratorio superior son la nariz, la cavidad nasal, la boca, la garganta (faringe) y la laringe. El sistema respiratorio se encuentra recubierto por una membrana mucosa que segrega moco, el cual atrapa partículas pequeñas como polen o humo. Estructuras pilosas que se denominan cilios recubren la membrana mucosa y desplazan las partículas atrapadas en el moco fuera de la nariz. El aire que se inhala se humedece, se calienta y se limpia mediante el tejido que recubre la cavidad nasal.

    Tracto respiratorio superior

    ilustración

  • Tracto respiratorio inferior - ilustración

    Los principales conductos y estructuras del tracto respiratorio inferior son la tráquea y, dentro de los pulmones, los bronquios, los bronquiolos y los alvéolos. En la profundidad del pulmón, cada bronquio se divide en bronquios secundarios y terciarios, que continúan ramificándose en vías aéreas más pequeñas que se denominan bronquiolos. Éstos terminan en sacos de aire que se denominan alvéolos, los cuales, a su vez, se unen en ramilletes para formar los sacos alveolares. El intercambio gaseoso se produce en la superficie de cada alveolo mediante una red capilar que transporta la sangre que llega a través de las venas desde otras partes del organismo.

    Tracto respiratorio inferior

    ilustración

  • Las mascarillas faciales previenen la propagación de la COVID-19 - ilustración

    Usar correctamente las mascarillas faciales en espacios públicos ayuda a disminuir la propagación de la COVID-19. La COVID-19 se contagia a las personas que están en contacto cercano por medio de pequeñas gotitas que se esparcen en el aire por alguien que tenga la enfermedad y que tosa, estornude, cante, hable o respire. Usar mascarillas faciales o cubiertas faciales de tela que cubran la nariz, la boca y la barbilla, y que se ajusten perfectamente a sus mejillas ayuda a disminuir el esparcimiento de gotitas respiratorias provenientes de la nariz y la boca. Además, usar una mascarilla facial lo ayuda a protegerse de infecciones.

    Las mascarillas faciales previenen la propagación de la COVID-19

    ilustración

  • Cómo usar una mascarilla facial para prevenir la propagación de la COVID-19 - ilustración

    Usar mascarillas faciales bien ajustadas ayuda a prevenir la propagación de la COVID-19. Para que las mascarillas funcionen, se deben usar adecuadamente. Elija una mascarilla con dos o más capas de tela que cubra completamente su boca y nariz, y que se ajuste perfectamente a los lados de su cara sin dejar espacios. No use una mascarilla que quede demasiado floja en los costados. No se baje la mascarilla de la nariz, por debajo de su nariz, boca o barbilla. No deje expuesta su barbilla o boca ni deje la mascarilla colgando de una oreja. No use la mascarilla de ninguna otra manera en la que no cubra por completo su boca y nariz. Lávese las manos antes y después de usar la mascarilla y use solamente las cintas de la mascarilla para colocarla y quitarla. No toque el frente de la mascarilla mientras la use. Si usa una mascarilla de tela, lávela y séquela diariamente, y manténgala limpia en un lugar seco.

    Cómo usar una mascarilla facial para prevenir la propagación de la COVID-19

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  • Vacuna contra la COVID-19 - ilustración

    Las vacunas contra la COVID-19 protegen a las personas de contraer COVID-19. Son una herramienta fundamental para ayudar a detener la pandemia de COVID-19. La vacuna trabaja con el sistema inmunitario de su cuerpo en contra del virus SARS-CoV-2, que causa COVID-19. Si bien las vacunas contra la COVID-19 no lo enfermarán, pueden causar ciertos efectos secundarios y síntomas parecidos a los de la gripe. Esto es de esperarse. Estos síntomas pueden ser una señal de que su cuerpo está produciendo anticuerpos contra el virus. Las personas completamente vacunadas pueden reanudar sus actividades sin usar una mascarilla o sin practicar el distanciamiento físico, excepto en donde sea requerido por las leyes, normas y regulaciones federales, estatales, locales, tribales o territoriales, incluyendo lineamientos para los negocios locales y el lugar de trabajo.

    Vacuna contra la COVID-19

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  • COVID-19 - ilustración

    Infección con coronavirus 2 del síndrome respiratorio agudo grave (SARS-CoV-2, por sus siglas en inglés) causa COVID-19, una enfermedad respiratoria que varía desde síntomas leves hasta neumonía e incluso la muerte. Los síntomas ocurren dentro de los 2 a 14 días posteriores a la exposición al virus y pueden incluir fiebre, tos, falta de aliento, escalofríos, dolor muscular, dolor de cabeza, dolor de garganta y pérdida del sentido del gusto o del olfato. COVID-19 puede ser más grave en personas mayores o personas con afecciones crónicas como enfermedades cardíacas o diabetes.

    COVID-19

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  • Coronavirus - ilustración

    Los coronavirus son una familia de virus. Las infecciones por coronavirus pueden causar enfermedades respiratorias, tales como el resfriado común. Algunos coronavirus pueden ocasionar enfermedad grave que puede llevar a neumonía e incluso la muerte.

    Coronavirus

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  • Sistema respiratorio - ilustración

    El aire se inhala a través de los conductos nasales y viaja a través de la tráquea y los bronquios hasta los pulmones.

    Sistema respiratorio

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  • Tracto respiratorio superior - ilustración

    Los principales conductos y estructuras del tracto respiratorio superior son la nariz, la cavidad nasal, la boca, la garganta (faringe) y la laringe. El sistema respiratorio se encuentra recubierto por una membrana mucosa que segrega moco, el cual atrapa partículas pequeñas como polen o humo. Estructuras pilosas que se denominan cilios recubren la membrana mucosa y desplazan las partículas atrapadas en el moco fuera de la nariz. El aire que se inhala se humedece, se calienta y se limpia mediante el tejido que recubre la cavidad nasal.

    Tracto respiratorio superior

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  • Tracto respiratorio inferior - ilustración

    Los principales conductos y estructuras del tracto respiratorio inferior son la tráquea y, dentro de los pulmones, los bronquios, los bronquiolos y los alvéolos. En la profundidad del pulmón, cada bronquio se divide en bronquios secundarios y terciarios, que continúan ramificándose en vías aéreas más pequeñas que se denominan bronquiolos. Éstos terminan en sacos de aire que se denominan alvéolos, los cuales, a su vez, se unen en ramilletes para formar los sacos alveolares. El intercambio gaseoso se produce en la superficie de cada alveolo mediante una red capilar que transporta la sangre que llega a través de las venas desde otras partes del organismo.

    Tracto respiratorio inferior

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  • Las mascarillas faciales previenen la propagación de la COVID-19 - ilustración

    Usar correctamente las mascarillas faciales en espacios públicos ayuda a disminuir la propagación de la COVID-19. La COVID-19 se contagia a las personas que están en contacto cercano por medio de pequeñas gotitas que se esparcen en el aire por alguien que tenga la enfermedad y que tosa, estornude, cante, hable o respire. Usar mascarillas faciales o cubiertas faciales de tela que cubran la nariz, la boca y la barbilla, y que se ajusten perfectamente a sus mejillas ayuda a disminuir el esparcimiento de gotitas respiratorias provenientes de la nariz y la boca. Además, usar una mascarilla facial lo ayuda a protegerse de infecciones.

    Las mascarillas faciales previenen la propagación de la COVID-19

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  • Cómo usar una mascarilla facial para prevenir la propagación de la COVID-19 - ilustración

    Usar mascarillas faciales bien ajustadas ayuda a prevenir la propagación de la COVID-19. Para que las mascarillas funcionen, se deben usar adecuadamente. Elija una mascarilla con dos o más capas de tela que cubra completamente su boca y nariz, y que se ajuste perfectamente a los lados de su cara sin dejar espacios. No use una mascarilla que quede demasiado floja en los costados. No se baje la mascarilla de la nariz, por debajo de su nariz, boca o barbilla. No deje expuesta su barbilla o boca ni deje la mascarilla colgando de una oreja. No use la mascarilla de ninguna otra manera en la que no cubra por completo su boca y nariz. Lávese las manos antes y después de usar la mascarilla y use solamente las cintas de la mascarilla para colocarla y quitarla. No toque el frente de la mascarilla mientras la use. Si usa una mascarilla de tela, lávela y séquela diariamente, y manténgala limpia en un lugar seco.

    Cómo usar una mascarilla facial para prevenir la propagación de la COVID-19

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  • Vacuna contra la COVID-19 - ilustración

    Las vacunas contra la COVID-19 protegen a las personas de contraer COVID-19. Son una herramienta fundamental para ayudar a detener la pandemia de COVID-19. La vacuna trabaja con el sistema inmunitario de su cuerpo en contra del virus SARS-CoV-2, que causa COVID-19. Si bien las vacunas contra la COVID-19 no lo enfermarán, pueden causar ciertos efectos secundarios y síntomas parecidos a los de la gripe. Esto es de esperarse. Estos síntomas pueden ser una señal de que su cuerpo está produciendo anticuerpos contra el virus. Las personas completamente vacunadas pueden reanudar sus actividades sin usar una mascarilla o sin practicar el distanciamiento físico, excepto en donde sea requerido por las leyes, normas y regulaciones federales, estatales, locales, tribales o territoriales, incluyendo lineamientos para los negocios locales y el lugar de trabajo.

    Vacuna contra la COVID-19

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Los conceptos básicos

 

Cuidados personales

 

Qué detecta esta prueba Enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19)

 
 

Actualizado: 2/22/2023

Versión en inglés revisada por: Frank D. Brodkey, MD, FCCM, Associate Professor, Section of Pulmonary and Critical Care Medicine, University of Wisconsin School of Medicine and Public Health, Madison, WI. Also reviewed by David C. Dugdale, MD, Medical Director, Brenda Conaway, Editorial Director, and the A.D.A.M. Editorial team. Editorial update 03/13/2024.

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