Cuidado de sonda permanente
Sonda (catéter) de Foley; Sondra suprapúbicaUsted tiene un catéter (sonda) interno o permanente en la vejiga. "Permanente o interno" significa dentro del cuerpo. Esta sonda drena la orina desde la vejiga hasta una bolsa por fuera del cuerpo. Las razones comunes para tener una sonda permanente son incontinencia urinaria (escape), retención urinaria (no ser capaz de orinar), cirugía que hizo necesaria la colocación de esta sonda u otro problema de salud.
Catéter (sonda) interno o permanente
Es una sonda que se coloca en el cuerpo para drenar y recolectar orina de la vejiga.
Lea el artículo ahora Marcar el artículo como favoritoQué esperar en el hogar
Será necesario que usted verifique que la sonda permanente esté trabajando adecuadamente. Usted también necesitará saber cómo limpiar dicha sonda y el área donde se fija al cuerpo para no contraer una infección ni presentar irritación de la piel. Convierta el cuidado de la sonda y de la piel en parte de su rutina diaria. Pregúntele al proveedor de atención médica si puede tomar una ducha con la sonda puesta.
Evite la actividad física por una o dos semanas después de que le coloquen la sonda en la vejiga.
Limpieza de la piel
Usted necesitará estos suministros para limpiar la sonda y la piel circundante:
- Dos toallas limpias
- Dos toallas de mano limpias
- Jabón suave
- Agua caliente
- Un recipiente o lavamanos limpio
Siga estas pautas de cuidado de la piel una vez por día, todos los días o con mayor frecuencia si es necesario:
- Lávese bien las manos con agua y jabón. Cerciórese de limpiarse entre los dedos y debajo de las uñas.
- Moje una de las toallas con agua caliente y échele jabón.
- Lave suavemente toda el área alrededor del sitio donde entra la sonda con la toalla enjabonada. Las mujeres deben limpiarse desde el frente hacia atrás. Los hombres desde la punta del pene hacia abajo.
- Enjuague la toalla con agua hasta quitarle el jabón.
- Agréguele más jabón a la toalla. Úsela para lavar suavemente la parte superior de las piernas y los glúteos.
- Enjuáguele el jabón y seque dando toquecitos con una toalla limpia.
- No use cremas, polvos ni aerosoles cerca de esta zona.
Limpieza de la sonda
Siga estos pasos dos veces al día para mantener la sonda limpia y libre de gérmenes que pueden causar infección:
- Lávese bien las manos con agua y jabón. Cerciórese de limpiarse entre los dedos y debajo de las uñas.
- Cambie el agua caliente del recipiente si está usando algo distinto a un lavamanos.
- Moje la segunda toalla con agua caliente y échele jabón.
- Sostenga la sonda con cuidado y empiece a lavar el extremo cerca de la vagina o del pene. Vaya recorriendo lentamente la sonda hacia abajo (lejos del cuerpo) para limpiarla. Nunca limpie desde el otro extremo de la sonda hacia el cuerpo.
- Seque suavemente la sonda con la segunda toalla limpia.
Usted fijará la sonda a la parte interna del muslo con un sistema de fijación especial.
Probablemente reciba dos bolsas. Una bolsa se fija a su muslo para usarse durante el día. La segunda bolsa es más grande y tiene un tubo de conexión más largo. Esta bolsa puede contener suficiente para usarse durante la noche. Le enseñarán cómo desconectar las bolsas del catéter de Foley para poder cambiarlas. También le enseñarán a vaciar las bolsas a través de una válvula separada sin la necesidad de desconectar la bolsa del catéter de Foley.
Verificar que la sonda esté funcionando
Será necesario que revise la sonda y la bolsa a lo largo del día.
- Mantenga siempre la bolsa por debajo de la cintura.
- Trate de no desconectar la sonda más de lo que sea necesario. El hecho de mantenerla conectada a la bolsa la hará trabajar mejor.
- Verifique si hay retorcimientos y mueva la sonda si no está drenando.
- Tome mucha agua durante el día para mantener la orina fluyendo.
Cuándo llamar al médico
Una infección de las vías urinarias es el problema más común para las personas con una sonda vesical permanente.
Comuníquese con su proveedor si tiene síntomas de una infección, como:
- Dolor alrededor de los lados o en la región lumbar.
- La orina huele mal o está turbia, o de un color diferente.
- Fiebre o escalofríos.
- Una sensación de ardor o dolor en la vejiga o la pelvis.
- Secreción o drenaje alrededor de la sonda en donde se inserta en su cuerpo.
- No se siente como si fuera usted mismo. Se siente cansado, adolorido y tiene problemas para concentrarse.
También consulte con su proveedor si:
- La bolsa se está llenando rápidamente y tiene un aumento en la orina.
- Usted está presentando escape de orina alrededor de la sonda.
- Nota sangre en la orina.
- La sonda parece bloqueada y no está drenando.
- Nota arenilla o cálculos en la orina.
- Tiene dolor cerca de la sonda.
- Tiene alguna preocupación con respecto a la sonda.
Referencias
Davis JE, Silverman MA. Urologic procedures. In: Roberts JR, Custalow CB, Thomsen TW, eds. Roberts and Hedges' Clinical Procedures in Emergency Medicine and Acute Care. 7th ed. Philadelphia, PA: Elsevier; 2019:chap 55.
Trautner BW, Hooton TM. Health care-associated urinary tract infections. In: Bennett JE, Dolin R, Blaser MJ, eds. Mandell, Douglas, and Bennett's Principles and Practice of Infectious Diseases. 9th ed. Philadelphia, PA: Elsevier; 2020:chap 302.
Actualizado: 1/1/2023
Versión en inglés revisada por: Kelly L. Stratton, MD, FACS, Associate Professor, Department of Urology, University of Oklahoma Health Sciences Center, Oklahoma City, OK. Also reviewed by David C. Dugdale, MD, Medical Director, Brenda Conaway, Editorial Director, and the A.D.A.M. Editorial team.