El ultrasonido abdominal es una técnica de barrido que se utiliza para obtener imágenes del interior del abdomen. Al igual que los rayos X, la IRM y la TC, juega un papel como herramienta para el diagnóstico. Los barridos de ultrasonido emplean ondas sonoras de alta frecuencia para producir una imagen sin que la persona sea expuesta a la radiación. El procedimiento es indoloro y seguro.

La ecografía o ultrasonido se ha convertido en un procedimiento estándar que se utiliza durante el embarazo. Dicho procedimiento puede mostrar el crecimiento fetal y detectar un número creciente de afecciones, tales como meningomielocele, cardiopatías congénitas, anomalías renales, hidrocefalia, anencefalia, pie zambo y otras deformidades. Este procedimiento no produce radiación ionizante, por lo que se considera un método muy seguro tanto para la madre como para el feto.

Los movimientos fetales conocidos como avivamiento comúnmente son sentidos por la madre entre la decimoséptima y la vigésima semana de gestación.

El tamaño del cerebro aumenta significativamente cerca de la trigésima semana de gestación. La mayoría de los órganos están bien evolucionados, por lo cual el feto puede ver y escuchar. Aunque es posible que los pulmones no estén lo suficientemente maduros, un bebé puede sobrevivir si nace en esta fecha.

El dúplex de carótida es un procedimiento de ultrasonido utilizado para evaluar el flujo sanguíneo que va desde la arteria carótida al cerebro. Las ondas sonoras de alta frecuencia son dirigidas al área desde una sonda transductora que se manipula manualmente. Estas ondas reproducen las estructuras arteriales y producen una imagen de doble dimensión en un monitor, en el cual se pueden visualizar obstrucciones o estrechamiento de las arterias.

El ultrasonido de la tiroides es una imagen de la glándula tiroidea, proyectada a través de ondas sonoras, tomada por un instrumento manual y traducida a una imagen de doble dimensión en un monitor. Se utiliza para el diagnóstico de tumores, quistes o bocios de la tiroides y es un procedimiento sin riesgo e indoloro.

El ultrasonido es una técnica de barrido, utilizada para mostrar la imagen del feto en crecimiento. El transductor emite ondas sonoras inaudibles, las cuales se despliegan en forma de abanico cuando recorren el abdomen. Cuando encuentran estructuras densas como el feto y la pared del útero, las ondas sonoras son recogidas por el transductor y traducidas en una imagen visual por la computadora.

Este ultrasonido para fetos normales se realiza a las 17 semanas de gestación. El desarrollo del cerebro y del sistema nervioso se inicia temprano en el desarrollo fetal. Durante un ultrasonido, el técnico busca, por lo general, la presencia de ventrículos cerebrales. Los ventrículos son espacios en el cerebro que se llenan con líquido. En este ultrasonido inicial, los ventrículos pueden observarse como líneas delgadas que se extienden a través del cráneo y aparecen en la parte superior derecha de la imagen.

El ultrasonido 3D proporciona una imagen de tres dimensiones del feto. Las ondas sonoras son enviadas en ángulos diferentes por el transductor para la computadora a reconstruir la altura, la anchura, y la profundidad de la imagen.

El ultrasonido abdominal es una técnica de barrido que se utiliza para obtener imágenes del interior del abdomen. Al igual que los rayos X, la IRM y la TC, juega un papel como herramienta para el diagnóstico. Los barridos de ultrasonido emplean ondas sonoras de alta frecuencia para producir una imagen sin que la persona sea expuesta a la radiación. El procedimiento es indoloro y seguro.

La ecografía o ultrasonido se ha convertido en un procedimiento estándar que se utiliza durante el embarazo. Dicho procedimiento puede mostrar el crecimiento fetal y detectar un número creciente de afecciones, tales como meningomielocele, cardiopatías congénitas, anomalías renales, hidrocefalia, anencefalia, pie zambo y otras deformidades. Este procedimiento no produce radiación ionizante, por lo que se considera un método muy seguro tanto para la madre como para el feto.

Los movimientos fetales conocidos como avivamiento comúnmente son sentidos por la madre entre la decimoséptima y la vigésima semana de gestación.

El tamaño del cerebro aumenta significativamente cerca de la trigésima semana de gestación. La mayoría de los órganos están bien evolucionados, por lo cual el feto puede ver y escuchar. Aunque es posible que los pulmones no estén lo suficientemente maduros, un bebé puede sobrevivir si nace en esta fecha.

El dúplex de carótida es un procedimiento de ultrasonido utilizado para evaluar el flujo sanguíneo que va desde la arteria carótida al cerebro. Las ondas sonoras de alta frecuencia son dirigidas al área desde una sonda transductora que se manipula manualmente. Estas ondas reproducen las estructuras arteriales y producen una imagen de doble dimensión en un monitor, en el cual se pueden visualizar obstrucciones o estrechamiento de las arterias.

El ultrasonido de la tiroides es una imagen de la glándula tiroidea, proyectada a través de ondas sonoras, tomada por un instrumento manual y traducida a una imagen de doble dimensión en un monitor. Se utiliza para el diagnóstico de tumores, quistes o bocios de la tiroides y es un procedimiento sin riesgo e indoloro.

El ultrasonido es una técnica de barrido, utilizada para mostrar la imagen del feto en crecimiento. El transductor emite ondas sonoras inaudibles, las cuales se despliegan en forma de abanico cuando recorren el abdomen. Cuando encuentran estructuras densas como el feto y la pared del útero, las ondas sonoras son recogidas por el transductor y traducidas en una imagen visual por la computadora.

Este ultrasonido para fetos normales se realiza a las 17 semanas de gestación. El desarrollo del cerebro y del sistema nervioso se inicia temprano en el desarrollo fetal. Durante un ultrasonido, el técnico busca, por lo general, la presencia de ventrículos cerebrales. Los ventrículos son espacios en el cerebro que se llenan con líquido. En este ultrasonido inicial, los ventrículos pueden observarse como líneas delgadas que se extienden a través del cráneo y aparecen en la parte superior derecha de la imagen.

El ultrasonido 3D proporciona una imagen de tres dimensiones del feto. Las ondas sonoras son enviadas en ángulos diferentes por el transductor para la computadora a reconstruir la altura, la anchura, y la profundidad de la imagen.